En materia de transporte, en el país se ha trabajado para impulsar acciones que ayuden a disminuir la contaminación, dotando a Santiago -por ejemplo- de una flota de casi 400 buses eléctricos, además de taxis ejecutivos eléctricos -con importante presencia de E-Mov (empresa B pendiente) -, buses interurbanos y camiones de reparto eléctricos, entre otras iniciativas orientadas a evitar las emisiones de dióxido de carbono.
Chile es el segundo país, después de China, en tener la mayor cantidad de buses eléctricos operando en el transporte público, que además de ser no contaminantes, son un 70% más económicos que los buses convencionales diésel, que gastan 300 pesos por km, mientras que un bus eléctrico recorre ese tramo a un costo de 70 pesos.
En materia de taxis eléctricos, en Chile hay tres ciudades que disfrutan de sus bondades: Santiago, con 35 vehículos 100% eléctricos, además de Valparaíso y Coyhaique (como servicio de colectivo), ambas con dos autos sustentables cada una. Por ahora, E-Mov ofrece sus servicios de traslado de personal con electromovilidad en Santiago, pero espera expandir su oferta a otras ciudades próximamente. Los traslados son gestionados mediante una plataforma digital, que ayuda a mantener el control de la gestión y la legalidad en la operación. Los resultados monitoreados permiten la entrega de un certificado oficial mensual de disminución de CO2 a las empresas que requieren el servicio.
De los 39 taxis eléctricos registrados en la Subsecretaría de Transportes, 31 corresponden al modelo Hyundai Ioniq EV GLS. En E-mov, tenemos una flota de 15 autos, incluyendo Hyundai Ioniq que aporta con su comodidad, elegancia y seguridad. En los próximos 5 años E-mov cuenta subir su número de autos a los 400 de acuerdo a los modelos que van saliendo en el mercado. El servicio a bordo en cualquier de los autos es de calidad, ofreciendo extras como wifi, cable de conexión y agua.
En relación a la venta de vehículos eléctricos en Chile, hasta octubre de 2019 se adquirieron 110 autos para uso particular y 53 para fines comerciales, cifras que se alinean a las metas del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, que se propuso para 2022 tener 10 veces más vehículos eléctricos que en 2018. En la actualidad, sin contar los buses, circulan por Chile más de 600 automóviles impulsados por electricidad.
Para el año 2050 se espera contar con un 40% de los automóviles y el 100% del transporte público funcionando en base a electricidad, objetivos enmarcados en la “Estrategia nacional para potenciar la electromovilidad en Chile”, un trabajo que une esfuerzos de los sectores público y privado. El Gobierno estima que las metas mencionadas se podrían conseguir 10 años antes de lo presupuestado.
La electromovilidad en Chile ha penetrado tan fuerte que ya se organizó un mega evento relacionado con el transporte sustentable, la FIDELMOV, Feria Internacional de E-Movilidad, que convocó a más de 8.500 personas en la Estación Mapocho y que tuvo 55 estand de empresas comprometidas con la electromovilidad, charlas y exposiciones con novedades como los futuros taxis aéreos que llegarán a nuestro país, exhibición de bicicletas y scooters de alta gama, patines eléctricos adheridos directamente a la planta del calzado, simuladores, autos clásicos reconvertidos, entre otras atracciones que volverán a sorprender en la segunda edición de la feria programada para el 3, 4 y 5 de septiembre de 2020, en el mismo lugar.
El calentamiento global y la crisis medioambiental que experimentan las grandes ciudades obligan a que materias tan importantes como la de evitar las emanaciones de dióxido de carbono sean una necesidad urgente, impulsadas desde la autoridad y respaldadas por los usuarios. La buena noticia es que existe voluntad para lograr la sustentabilidad de Chile en materia de transporte.
La electromovilidad en Chile ya dio sus primeros pasos.